miércoles, 29 de octubre de 2014

Mamá, quiero ser ponente. "Trabajos saludables: Gestionemos el estrés"


Con motivo de la Semana Europea para la Seguridad y Salud en el trabajo, celebrada del 20 al 24 de Octubre, se han celebrado cientos de actos bajo el lema “Trabajos saludables: Gestionemos el estrés”.

El pasado día 23 asistí a la jornada técnica organizada por el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT) en Madrid.
Una primera mesa redonda sobre “Buenas prácticas en la gestión de los riesgos psicosociales en el trabajo”, nos dio a conocer por parte de dos representantes de dos empresas candidatas a los Galardones Europeos a las buenas prácticas 2014-2015 (Samur y Gas Natural Fenosa), como se consigue llevar a cabo la gestión de prevención de riesgos psicosociales dentro de las empresas.

Visualizar los objetivos, plantear un plan de acción, ejecutar y controlar ese plan y obtener beneficios.

Se plantean hábitos de vida saludables, motivaciones personales, campañas de salud, apoyo psicológico, talleres…

Los riesgos psicosociales se evalúan por oficios con los trabajadores. D. Jorge López Ávila, jefe del SIRP- IRSST- Madrid, junto con Dña. Olga Castañeda, del observatorio de riesgos psicosociales de UGT, coincidían en la necesidad de implicar al trabajador en los procesos de evaluación de riesgos, de forma voluntaria y totalmente confidencial, dotando a éstos de poder de decisión sobre sus puestos de trabajo sin lastres que arrastrar.

Pasamos a una segunda mesa redonda: “La punta del iceberg”, obra de teatro de Antonio Tabares, fue un lujo presenciar una ponencia de una mesa artístico-técnica, con gente tan cualificada.
La punta del iceberg, es una obra de teatro basada en los hechos ocurridos en Renault en 2006 tras el suicidio de algunos miembros de su plantilla a causa de la situación laboral que atravesaban.



Puedes leer más:

En colaboración con el Instituto Canario de Seguridad laboral, representada allí por D. Elirerto Galván, se llevó la obra a todas las islas y se trabajó conjuntamente con los responsables en materia de prevención en referencia a los riesgos psicosociales a los que nos exponemos los trabajadores. Frases y hechos del tipo “Si no te interesa te vas”, contratos de 4 horas y jornadas reales de 8, trabajos a deshoras, tiempos que cumplir… desencadenan en una serie de situaciones que pueden llegar a ser catastróficas para el trabajador y la empresa.

D. Elirerto hizo hincapié en la formación de empresas y trabajadores en este ámbito, mejora en las ayudas a PYME y microPYME, aclaración del marco normativo…

En este último punto, coincidía con Dña. Sandra Miso, del Área de Seguridad Social y Prevención de Riesgos Laborales del Departamento de Relaciones Laborales de CEOE, ponente de la última mesa redonda “Aportaciones para una gestión participativa de los riesgos psicosociales”,  sobre la necesidad de revisar y aclarar el marco normativo vigente en materia de prevención. Resaltó también la importancia de hacer políticas de prevención adaptadas a las empresas y a los puestos de trabajo.

Tras esta jornada, realmente productiva, con una serie de ponentes magníficos, me quedaron muy buenas sensaciones por saber que se está trabajando en la prevención de este tipo de riesgos que son, como todos sabemos, difíciles de detectar por ser más subjetivos y que pueden generar respuestas de tipo fisiológico, emocional y de conducta.

Por otro lado, concluí que es algo sobre lo que aún queda mucho que investigar y trabajar para tenerlos en verdadera consideración y que realmente, en la actualidad, las empresas que  se plantean considerarlos, son única y tristemente aquellas que se encuentra en un nivel empresarial elevado.

El día 24, se celebró en el COAAT de Madrid, una jornada donde Umivale presentaba su herramienta de gestión y evaluación de los riesgos psicosociales, HEREP (Herramienta de para la Evaluación  de Riesgos Ergonómicos y Psicosociales), proyecto dirigido por el Dr. D. Rafael Ruíz Calatrava, director de programas y planes corporativos de la mutua Umivale.
Una de las principales características del programa es que está pensado para evaluar todo tipo de puestos de trabajo y dirigido al trabajador. El programa analiza la carga mental y los factores psicológicos que dan lugar a una mayor o menor satisfacción del trabajador.
Según D. Rafael, en los últimos 5 años se ha conseguido reducir un 53% las bajas y ha aumentado un 10% la satisfacción laboral.

Y mi pregunta llegado a este punto es, ¿Cómo te enfrentas tu a una empresa y le planteas que existen unos riesgos de tipo psicosociales, que hay que analizarlos y evaluarlos y en consecuencia actuar?

Pues aquí en cuando “entra en juego” el último ponente, D. Antonio Moreno Ucelay, director del servicio de prevención mancomunado del grupo Iberdrola.

A una empresa le entras con este tipo de riesgos con datos. Se presenta a la dirección de la empresa, datos de bajas laborales causadas por trastornos mentales, depresión, estrés… y posteriormente se traducen estos datos a dinero.

Se calcula que más de 45 millones de trabajadores se ven afectados por riesgos de tipo psicosocial y la falta de prevención de los mismos cuesta alrededor del 4% del PIB europeo.

En 2012 el 20% de las bajas laborales fueron debidas a riesgos psicosociales, que traducido a euros suponen 300 millones de euros de gasto al sistema público.

El Observatorio de Riesgos Psicosociales subraya que prácticamente 1 trabajador muere al día, en nuestro país, por enfermedades que se asocian a los trastornos mentales.

La Asociación Internacional de la Seguridad Social (AISS) concluyó que, por  cada euro que invierte la empresa en cada trabajador en la prevención de riesgos, se puede obtener un rendimiento económico de 2,20 euros.

Vuelvo a mi primera conclusión, bajo mi punto de vista, la triste realidad es que son sólo las grandes empresas las que invierten en la evaluación y prevención de este tipo de riesgos sobre los que aún queda mucho camino que recorrer. En palabras del propio D. Rafael Ruiz, abordar el análisis del riesgo psicosocial constituye una acción de empresas socialmente avanzadas y éticamente responsables.

Como conclusión general, jornadas muy productivas e interesantes, con la oportunidad de escuchar a ponentes pertenecientes a grandes empresas y entidades con mucho que aportar y mucho sobre lo que reflexionar para que entre todos fomentemos "Trabajos saludables" y "Gestionemos el estrés"

Nuevas motivaciones, nuevos objetivos.


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martes, 14 de octubre de 2014

Honorarios profesionales: La "prostitución" de la profesión

Como todos sabemos, corren malos tiempos para los profesionales del sector de la construcción. El descenso considerable de trabajo y la gran cantidad de personal cualificado está desencadenando la “lucha” entre profesionales por la materialización del mismo. Y, ¿Cómo se pretende ganar esta “lucha”? Con la reducción de honorarios, hasta el punto de llegar a “prostituir” la profesión.

En España, los honorarios profesionales de arquitectos y arquitectos técnicos no están reglados por un baremo, es decir, son libres para cada profesional y se ajustan al servicio que dan. Hay países de la Unión Europea, por ejemplo, en Alemania, donde existen unas tarifas reguladas que dan una idea tanto al cliente como a la propia administración de aproximadamente las tarifas en las que se mueven los profesionales que pretendemos contratar, impidiendo que se trabaje por debajo de ciertos límites o por el contrario, muy por encima.

Generalmente el presupuesto de honorarios va en función de los m2 de la construcción y el trabajo a realizar. Cada profesional es libre de valorar su trabajo como convenga, pero sin llegar a sobrepasar unos límites bajo los cuales se comienza a infravalorar el trabajo que realizamos, no llegamos a cubrir los gastos mínimos y resulta casi imposible arrastrar con la carga del sistemas de garantías que establece la LOE, de responder ante posibles defectos de proyecto u obra durante un periodo de diez años, lo que viene a ser “prostituir” la profesión.

Los arquitectos y arquitectos técnicos, tenemos una responsabilidad civil decenal de cada obra, es decir, si surge algún problema en el trascurso de la obra o en un periodo de diez años desde la finalización de la misma, somos los responsables. Para eso pagamos el seguro durante esos diez años y si no lo cubre, es el implicado, arquitecto y/o arquitecto técnico, el que puede perder la casa o, en caso de que exista responsabilidad penal, pagarlo con la cárcel.

Resulta un lastre en el desarrollo de la profesión, puesto que la responsabilidad civil la asumen las personas y no las empresas. En caso de que en esos diez años que cubre el seguro la empresa desaparezca, el responsable es el arquitecto o arquitecto técnico que realizara el trabajo, siga en activo o no.

Además del gasto del seguro, como profesionales libres, tendremos una serie de gastos que también hay que cubrir como: seguro de autónomo, cuota colegial, prima complementaria del seguro de responsabilidad civil (implícita de cada intervención) que variará en función de los m2 y de la intervención, gastos propios de oficina (agua, luz, alquiler…), material de oficina (papel, tinta, mantenimiento impresoras…), teléfono, combustible…un sin fin de gastos que también hay que pagar.

La crisis, tanto económica como inmobiliaria, está generando que los profesionales compitamos en coste y no en calidad. Hay compañeros que están tirando los honorarios por los suelos realizando presupuestos de honorarios hasta tres veces por debajo de la media.

Un ejemplo de ello son los certificados energéticos. La entrada en vigor del Real Decreto 235/2013 de 5 de abril, por el que se aprueba el procedimiento básico para la certificación de la eficiencia energética de los edificios, ha supuesto una nueva fuente de ingresos para muchos profesionales. Sin embargo, la bajada en los precios ha llegado a ser tan alarmante que desde los colegios profesionales se ha advertido del peligro de dichas bajas. 

El precio medio de los certificados para pisos está en torno a 200 euros (http://www.elconfidencial.com/vivienda/2013/04/06/la-pregunta-del-millon-cuanto-cuesta-un-certificado-energetico-118261). Sin embargo, en portales como Groupon o Groupalia, se ofrecen descuentos de hasta el 70%, o páginas web donde el precio medio para una vivienda de 60-100m2 es de 45€.  Precios que sin lugar a duda dejan a los verdades profesionales fuera de juego. 

En el siguiente enlace aclaran un poco el “juego” de estos portales web con la venta de cupones de descuento.


En fin, cada uno que juzgue…









jueves, 2 de octubre de 2014

Método de "Tajo largo". (Longwall Mining).


Uno de los principales métodos de explotación minera subterránea en el mundo, es el método del tajo largo, ya que presenta grandes ventajas frente a otros métodos.

Es interesante destacar en primer lugar cuando es conveniente o recomendable el uso de este método de trabajo.
Pensaremos en esta forma de trabajo para la explotación en mina subterránea de un yacimiento (puede ser carbón o cualquier otro material blando-medio), sea en capas horizontales o casi horizontales y de capas de poca potencia. 

Ahora que sabemos cuándo usarlo vamos a ver en que consiste:

El método de “tajo largo” se puede considerar una sofisticación del método Shropshire, debido a las nuevas tecnologías y al desarrollo de la maquinaria. El método consiste en aislar la zona de trabajo e ir avanzando por el frente “fila a fila”, dejando tras de sí el derrumbe del techo, de forma que ayude a la estabilidad y libere de carga a los pilares realizados previamente.


A groso modo ese es el método, ahora bien, lo voy a intentar explicar un poco más al detalle:

En una primera fase se realizarán los trabajos necesarios para alcanzar la cota de trabajo, bien mediante un pozo, bien mediante una rampa ( igual que en todas las galerías que se realicen , hay que tener en cuenta que valdrán tanto para la evacuación del material, como para los conductos de ventilación).

                
              Luego se perforara una galería que será la vía principal paralela a los frentes de trabajo y la zonificación de trabajo mediante dos galerías paralelas. Ahora bien, el método se puede aplicar en 2 modalidades, en avance o en retroceso.



                
                      
Una vez delimitada la zona de trabajo mediante dos galerías, que será por donde daremos salida al material y nos permite el acceso, armaremos la maquinaría. Ésta se divide en cuatro partes:

  1.    El escudo (Roof support), que forma la zona de seguridad, manteniendo aislada la zona de trabajo de posibles desprendimientos.
  2.    Pistones de avance, como su propio nombre indica, es la forma que tiene la maquinaria para avanzar. Su movimiento será en dos fases, una primera fase donde avanzan la cinta de cadenas y la cortadora y una segunda fase donde avanza el resto.
  3.    El mineral arrancado se extrae el tajo por medio de transportadores de cadenas o panzer’s (Main AFC) que descargan en cintas transportadoras que discurren por las galerías hacia el exterior de la mina.
  4.     Parte de corte o desbroce (Shearer), es la parte que utiliza la máquina para desgarrar el carbón, bien puede ser por una rozadora o por un cepillo. Un método de trabajo es pasar los elementos de corte por la parte baja del estrato para que la parte superior caiga por su propio peso.


     A la izquierda podemos ver la fotografía de una rozadora, mientra que en la imagen superior vemos el llamado cepillo.


        Es un método que da una alta producción, pero en cambio solo tiene ese frente de trabajo, por lo que si se detiene tendremos la producción parada y no llegaremos a cumplir con los contratos de modo que mientas se trabaja en un frente se va acondicionando el siguiente.




La ventilación es simple siguiendo las galerías ya hechas, pero tendrá un especial seguimiento debido a la gran cantidad de polvo que se produce con este método.

Aquí dejo un vídeo explicativo, de la casa Caterpillar: https://www.youtube.com/watch?v=bXORrVmxwbM